Registro de parentesco

Explicación:
Una familia significa unión, amor y lealtad. La familia Valmont es un buen ejemplo de eso. Ancestralmente pura por accidente meramente y no por algún canon o estereotipo se destaca por no ser particularmente puristas. Su criterio es propio y su criterio siempre ha apuntado a una igualdad, hasta que se demuestre lo contrario, también es fácil encontrar secretos en la misma. Este secreto pertenece a la rama de la familia a la cual pertenece Odette.
Y todo secreto conlleva una interesante historia. La historia de este secreto comienza en la época de la primera guerra mágica. Jack Valmont fue trasladado del ministerio francés al inglés y, de alguna manera las estrellas comenzaron a confabularse. Si existiese el destino, entonces eso sería exactamente lo que se accionó. Jack Valmont, viudo, hacía tanto había engendrado a tres hijos: Roldán, Ian y Eileen Valmont, junto a su esposa Juliette Deneuve, la cual falleció poco tiempo después al nunca recuperarse por completo tras el parto de la pequeña Eileen. Criando él solo a los tres con gran esmero y orgullo, los primeros colaboraron como aurores en el torneo de los tres magos, como un equipo de seguridad, al saberse que eran tiempos donde el señor Tenebroso acechaba en todo su esplendor el mundo mágico, reclutando magos con sucias y sucias ambiciones y, la última siendo apenas una estudiante de Beauxbatons asistiendo a dicho evento en apoyo de su Colegio.

Cuan peligroso pudieron ser esos tiempos juveniles si se era un mago. Una guerra entre el bien y el mal, por el poder, y donde el fin justicaba los medios, incluso la muerte. Es allí donde todo empieza a torcerse, un evento fortuito, una bufanda de color azul celeste arrancada del cuello por el fuerte viendo invernal y donde al intentar recuperarla cambiaría el curso de toda una vida, o mejor dicho aun, de toda una familia. ¿Cuán afortunado debería haber sido el que la joven Eileen recuperara la bufanda del joven y callado Regulus Black? ¿Destino tal vez? ¿Casualidad? Todo lo que se puede decir es que nadie estaba preparado para todo lo que pasaría a continuación. Lo cierto es, que el amor es la magia más poderosa que existe y cuando llega no muy fácil te puedes liberar del mismo, cuando esa clase de magia te liga a una persona y comienza a correr por tus venas. Fue así como Regulus Black se enamoró de la joven francesa, arruinando por completo sus planes para un futuro que tenía fríamente planeado. Regulus Black era un mortífago, un fiel seguidor en las filas de Lord Voldemort.

Sin embargo, el amor, cuando eras uno de ellos era algo peligroso y, como tal debía permanecer en penumbra. Tanto para aquellos defensores del bien como para aquellas largas filas que aumentaban día tras día junto al ascenso del Señor Tenebroso.

El segundo hecho peligroso en ese tipo de relaciones es fue el no ser totalmente diestro en el arte de la legeremancia, al Señor Tenebroso no se le puede ocultar nada, eso era algo que debías saber muy bien como uno de sus seguidores, él tarde o temprano se enteraría, sabría tu debilidad y la usaría, pues odiaba que tuviesen alguna y te haría destruirla por el simple placer de poder hacer lo que le viniese en gana o si veía amenazado su creciente poder; Ese fue el primer acto como títere de Lord Voldemort que Regulus francamente detesto. Una mañana fría, un callejón oscuro y una simple orden era todo lo que cambiaría el curso de la historia, algo tan sencillo que según el señor tenebroso no debía suponer un gran esfuerzo para el joven Black, si demostraba pertenecer a los Mortífagos con honor, como tanto juraba a su señor… - Lealtad, joven Black- dijo como recordatorio Lord Voldemort antes de desaparecer… pero, ¿Qué podía ser tan malo para que Regulus se odiase a sí mismo? Bueno, la respuesta fue sencilla, asesinar al hermano de su querida francesa justo el día de su boda.

Y así lo hizo.

Soportando apenas el dolor que le había causado a la joven Eileen, sin ella siquiera pensarlo y refugiándose en los brazos del asesino de su hermano, sin siquiera saberlo. Allí fue donde comenzó la espiral de secretos, la cual iba torciéndose más y más oprimiendo el pecho del joven Black, el cual, si bien la amaba, jamás develó que perteneciera a la legión de mortífagos y, mucho menos que su varita fuese la dueña de la muerte de Ian Valmont, fue entonces cuando tomó la decisión de hacerlo pagar por lo que había hecho, si lo sabes bien y conoces la historia, también Regulus Black, conocía parte de la historia del Señor Tenebroso, y tenía en su poder algo que podía impedir que llegara al poder si tenía éxito en su misión.

Un pequeño salto en el tiempo nos lleva a otro secreto más; un matrimonio secreto, fortuito. Un matrimonio que haría de Eileen parte de la familia Black. Un matrimonio que debido a las circunstancias estaría destinado a la tragedia. Ningún secreto dura para siempre y un pequeño descuido por parte de Regulus mostró la terrible marca tenebrosa en su antebrazo derecho. Hubo preguntas, rabia, y poco tiempo después se Eileen hizo la pregunta que Regulus tanto temía: ¿Había sido participe en la muerte del auror Ian Valmont? A lo cual contestó solamente con un silencio ensordecedor. Después todo se vino en picada, todo por lo que Regulus había trabajado, dejándolo molesto por sus actos, las consecuencias de estos y la forma vil en la que el señor tenebroso había abusado de su poder y lo había convertido en la marioneta que, finalmente, había logrado dañar a quien más quería. Era hora de que el también actuara.

Con mucho pesar Eileen Valmont no volvería a saber de él y, sin embargo, llevaba en su vientre el fruto de un amor que despreciaba al existir la posibilidad de pertenecer al asesino de su propia sangre. Huyendo a Francia y bajo la protección de su familia, dio a luz a un par de gemelos, los cuales llevaría por nombre Sebastian y Stella Valmont.

¿Una vergüenza? No le importó. Eileen les amó apenas nacieron y si bien no hubo un juramento, sus hijos no llevarían jamás el apellido que les correspondía: Black.

Con el correr de los años y la nueva generación Valmont ya crecidos; comenzaremos por contar primero la historia de Sebastian, un joven mago ya mayor de edad y absolutamente enamorado de su novia, Genevieve, y el cual se unió a ella de todas las maneras posibles: un matrimonio por todo lo alto y la promesa de amarse hasta que la muerte los separara. Ellos comenzarían una nueva incursión y aventura: su propia familia en un país diferente. Llámalo destino o un llamado de la sangre al ser en realidad un Black, Sebastian regresó a Inglaterra junto a su familia, su esposa y sus tres hijos: Isacar y Sophie, los cuales era mellizos y Odette, la más pequeña.